Alternativas de ir al trabajo en coche

Comienza septiembre y con este mes la vuelta al cole (o al trabajo de jornada completa) y los embotellamientos en las principales arterias de la ciudad. Sabemos que esto último, es una de las causas de mayor estrés en la actividad laboral.

Al menos eso dice el estudio de movilidad realizado por la casa Ford, donde los encuestados aseguran que:

  • El 63% llega tarde al menos una vez al mes.
  • El 27% llega tarde al menos tres veces al mes.
  • El 49% de quienes utilizan tres o más medios, encuentran los desplazamientos más estresantes.

Las cifras de por sí, hacen estresarnos aún más, por eso buscamos  mejorar nuestra experiencia de camino al trabajo:

Además del factor del tiempo, el gasto mensual puede variar dependiendo de un transporte u otro. Como es lógico la forma más barata de desplazarse es caminar o ir en bicicleta, permitiéndonos llegar hasta los 2 y 3 km de distancia. El transporte público dependerá del precio del abono y del número de desplazamientos que se hagan al día. En este caso, el gasto del combustible de una moto pequeña puede ser menor que ir en bus o metro.

Mientras que el coche es el transporte más utilizado en los transportes fuera de la ciudad, el transporte público se utiliza más dentro del núcleo urbano: caminar, ir en bici o en moto y compartir coche en trayectos mayores puede convertirse en otras posibles alternativas para sobrellevar la rutina y cambiar nuestros hábitos.

Una iniciativa que está poniéndose muy de moda es compartir coche para trayectos largos o en sustitución de la utilización de varios medios de transporte. Encontrar un conductor que viva cerca de nuestra casa o alternar con un compañero de trabajo quien conduce cada día, puede reducir gastos de combustible.

También existen plataformas que conectan conductores y pasajeros como BlaBlaCar.es, Roadsharing.com o Carpling.es, donde se anuncian viajes para compartir coche al trabajo.

Y ahora, ¡a hacer de nuestra vuelta a la vida laboral más llevadera!